Quieres ahorrar en calefacción, te contamos los mejores trucos...

Tener que calentar nuestros hogares hace que nuestra factura energética se dispare, y más este año debido a las subidas de los precios de luz y gas. Por ello, desde Expert queremos darte unos trucos para que poner la calefacción no te salga tan caro.

Con la llegada del frío tenemos que empezar a encender nuestras calefacciones y ya sabemos que eso implica un incremento del importe de nuestras facturas. Siguiendo estos simples consejos conseguirás ahorrar en calefacción y que tu consumo no sea tan elevado.

• Tarifa idónea. Lo primero que tienes que hacer es asegúrarte de que tienes la tarifa adecuada para tus necesidades. Tarifa plana, más barata por la mañana, más barata por la tarde…. No te convendrá la misma si pasas todo el día en casa o estás solo por la mañana o por la tarde. Así que no te preocupes en perder un poco de tiempo en comparar varias tarifas para encontrar la perfecta para ti.
• Mantenimiento de los radiadores. No te olvides de purgar o sacar el aire acumulado en el interior de los radiadores. Con el paso del tiempo, burbujas de aire se acumulan en su interior dificultando la circulación del calor y haciendo que tus radiadores no funcionen al máximo rendimiento. Este proceso deberás hacerlo como mínimo una vez al año.

• No cubrir los radiadores. No pongas muebles muy cerca ni cubras los radiadores con objetos o ropa húmeda. Si lo haces, estarás creando una barrera térmica y solo conseguirás que tus radiadores tengas que trabajar mucho más para poder calentar la estancia.
• Temperatura adecuada. La temperatura idónea que se recomienda tener en casa para ahorrar energía es de 19 a 21 grados. Es preferible usar jersey o sudadera dentro de casa. Mantener una temperatura estable y evitar poner la calefacción muy alta hará que consigas tener mayor ahorro energético.

• No pongas la calefacción en las habitaciones vacías. Generalmente, hay como mínimo un radiador por habitación. Observa bien las estancias de tu casa y, en las que no vayas a estar o simplemente las uses de paso, apaga los radiadores y cierra la puerta.
• Desconecta la calefacción por la noche. Si no vives en una zona de frío extremo, no será necesario que la mantengas encendida por la noche y conseguirás rebajar el consumo.
• Programador. La idea de instalar un programador para que la calefacción se conecte 30 minutos antes de que te levantes y tener la casa templada será muy buena opción. También es la mejor elección para aquellas personas que se pasen todo el día fuera de casa y quieran que esté calentita cuando vuelvan.

• Ventilación de la casa. Sabemos que, aunque sea invierno, es recomendable ventilar la casa todos los días. ¡Pero hazlo con cabeza! Abre las ventanas a primera hora del día cuando todavía no hayas conectado la calefacción o no se haya acumulado mucho calor en casa. También es buena opción hacerlo cuando esté más soleado. Con que mantengas las ventanas abiertas durante 10-15 minutos será más que suficiente.
• Asegúrate de que la casa está bien aislada. Que alguna ventana no cierre bien o el hueco que queda entre la puerta y el suelo, puede ser los culpables de que el calor de la casa se escape hacia el exterior haciendo que sufras un gasto innecesario. Utilizar burletes o alguna alfombra que cubra el hueco de la puerta.
• Aprovecha las persianas y cortinas. Aunque estemos en invierno, el sol también calienta. Si en días soleados subimos las persianas hasta arriba conseguiremos que los rayos de sol calienten la estancia a través del cristal. Con lo que ganaremos un plus de calor que no se reflejará en nuestro consumo. Las cortinas nos servirán de aislante en las ventanas, evitando que el flujo de aire de exterior a interior y viceversa sea superior.

• Paneles reflectantes. Puede que estéticamente no sea lo mejor, pero son efectivos. Si los colocas detrás de los radiadores conseguirás que el calor no se quede acumulado en la pared y se disperse más fácilmente por la habitación.
• Y por último, si estás pensando en cambiar la caldera, hazlo por una de bajo consumo. Sabemos que esto supone una gran inversión, pero a la larga te compensará viendo cómo se reducen tus facturas.

¡Esperamos que estos trucos te vengan bien! Como puedes ver, con solo cambiar algunos hábitos de tú día a día, conseguirás tener un ahorro energético en tu hogar y no sufrir un gran susto al ver tu factura. 

¡¡¡Feliz ahorro!!!