La calidad del aire que respiramos es algo muy importe para nuestra salud y debemos cuidarlo como le corresponde. Uno de los factores que tenemos que controlar es la humedad en el ambiente y tener un humidificador en el hogar hará que su nivel sea el idóneo. ¿quieres saber todas las ventajas de disponer de uno? ¡En Expert te las contamos!
Lo primero que tenemos que saber es que la humedad es la cantidad de vapor de agua que hay en el ambiente, cuánto más agua flote en nuestro ambiente más humedad tendremos. Según los expertos los niveles en interiores deberán ser de entre 30% y 50%. Si los niveles de nuestra estancia son inferiores o superiores podrían perjudicar nuestra salud, sobre todo provocándonos algún problema respiratorio. Con un humidificador podremos mantener los niveles correctos en nuestras casas y favorecernos de todos estos beneficios:
Favorece la entrada de aire a nuestros pulmones. Cualquier persona con problemas respiratorios ya sea por asma, alergias, tabaquismo o alguna afección crónica, tiene dificultades para conseguir que el aire llegue a sus pulmones. Con niveles adecuados de humedad conseguiremos que el aire llegue mejor y facilite la respiración.
La falta de humedad aumenta la irritación. Todo nuestro
cuerpo sufre más irritación con una humedad baja. En un ambiente seco nuestros
ojos y nuestra piel se irrita y sufrimos picores. Nuestras vías respiratorias
no solo se irritan, también se inflaman y nos lleva a tener constantes
molestias como tos, picor o carraspeo. Con un humidificador conseguiremos
mantenerlas en buen estado.
Reduce el riesgo de enfermedades infecciosas. El tener un
ambiente seco hace que los microorganismos que provocan enfermedades
infecciosas puedan extenderse con mayor facilidad. Si mantienes la humedad
idónea, las partículas de saliva que expulsamos al hablar se unen unas con
otras pesando más y cayendo más rápidamente.
Ayuda a prevenir problemas dermatológicos. Nuestra piel
también se beneficia ya que con una humedad adecuada conseguiremos que no se
seque y se mantenga hidratada y sana.
Mantiene el aire limpio: la humedad hace que el aire se
renueve con más facilidad y circule mejor. Esto beneficiará a personas con
problemas respiratorios como asma y bronquitis ya que la expectoración será más
fluida y mejorará su respiración.
Reducen la congestión nasal. El uso de un humidificador
ayuda a disolver la mucosidad y expulsarla, lo que beneficia a nuestra
respiración.
Reduce las molestias de la gripe y el resfriado. Estas dos
patologías son las más comunes en los meses de invierno, que es la época en la
que nos es más difícil mantener la humedad de nuestros hogares. Con el
humidificador conseguiremos aliviar sus síntomas gracias al efecto que tiene su
uso en las vías respiratorias.
Nos ayudan a dormir mejor. Conseguiremos descansar mejor y
conseguir que nuestro sueño sea más reparador con una humedad óptima en nuestro
dormitorio mientras dormimos. Dormir en ambientes secos hace que nos cueste
conciliar el sueño y utilizar un humidificador nos ayudará a solucionarlo.
Recuerda que deberás colocarlo como mínimo a dos metros de distancia de la
cama.
Protegeremos la salud de los más pequeños. Los pequeños de la casa son mucho más sensibles a los cambios de humedad, sobre todo a los descensos. El disponer de un humidificador nos ayuda a preservar su salud cuando sea necesario. Recuerda que deberás colocarlo fuera del su alcance.
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